Aaron Cabrera
Los claretianos, que solo fueron capaces de anotar 9 puntos en los primeros diez minutos, lastraron la desventaja en todo momento pese a ganar los siguientes tres actos. El jugador más valorado del partido fue Isaiah Wong con 20 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias y 19 de valoración.
Noche de gala en El Arena que homenajeó de la mano de su presidente, Sitapha Savané, minutos antes a Andrew Albicy por convertirse en el máximo asistente de la historia del club claretiano. Lakovic, que destacó la versatilidad de la Penya, confió en sus cinco fantásticos para comenzar el choque; Andrew Albicy, Isaiah Wong, Nico Brussino, Louis Laberye y Mike Tobey. Intensidad y pocos puntos en un inicio de partido desacertado para ambos equipos. Cameron Hunt, escolta verdinegro, abandona la cancha por dos faltas en apenas un minuto de juego. La defensa visitante ahogaba a los amarillos y Vives colocaba el 2-7 desde más alla del 6,75. Vives volvía a enchufar su segundo triple casi desde la misma posición (2-12) y Lakovic se veía obligado a pedir el primer tiempo del partido con 5.52 por jugarse. La Penya, con un parcial de 0-15, volaba en la cancha mientras que los claretianos morían en la orilla. Ni el cambio de quinteto servía para calmar a los amarillos, que a falta de tres minutos por terminar el primer acto solo habían anotado 4 puntos. El Arena se impacientaba y el Joventut olía la sangre (7-22). Intercambio de canastas que solo acrecentaba la ventaja verdinegra (9-29) en uno de los peores cuartos de la historia del conjunto amarillo. El Arena ajusticiaba y con razón a un equipo que parecía sin alma y sin gen competitivo.
El segundo cuarto arrancaba con conato de remontada tras un buen triple de Pelos pero Birgander no paraba de hacer daño en la pintura. Muchas impresiones y malos ataques que permitían a los de Daniel Miret jugar demasiado cómodos. Eric Vila, con cinco puntos seguidos, colocaba el 17-33 y el Arena amenazaba con volver a despertar. Wong, con una bandeja de costa a costa, ponía el -14 y ahora sí, volvía el Arena a rugir. 6:06 y primer tiempo de Daniel Miret, que no le gustaba nada la apatía de los suyos tras unos ataques poco organizados e individualistas. Ricky transmitía calma pero Albicy lograba sacarle la segunda falta personal con más de la mitad del segundo acto por jugarse. Otro tiempo muerto de Lakovic y bronca incluida a Brussino, con 21-39 en el luminoso y síntomas de no poder con los verdinegros. Técnica al banquillo amarillo y Hakkanson situaba la máxima del partido (21-42). El poco acierto local hacía imposible la remontada y la Penya, con muchas guerras encima, jugaba a la perfección con los nervios de su rival. Ruzic, con un libre adicional, situaba una nueva máxima de 23. La defensa seguía sin aparecer y los intercambios no ayudaban a mitigar la fuga verdinegra. Dos tiros libres de Albicy daban por finalizado el segundo cuarto y ponían el 33-49 en el luminoso.
Paso por los vestuarios y piña previa amarilla antes de comenzar. Brussino despertaba con un triple casi desde el logo al mismo tiempo que los de Miret se ponían en bonus con 6:20 por jugarse. La defensa claretiana reaparecía en este cuarto y Brussino, con tres tiros libres, colocaba el -9, el conato de remontada estaba encendido. Apretaban los de Lakovic y resistían los visitantes de la mano de la vieja guardia, Tomic/Rubio. Kur Kuath y Angola volvían a escena tras su despropósito actuación del primer tiempo. Las desconexiones en defensa no dejaban a los claretianos acercarse lo suficiente para forzar a la Penya y Lakovic, solicitaba nuevamente un tiempo muerto por la pasividad de los suyos, que volvían a verse 15 abajo. Demasiadas faltas de uno y otro lado y poco movimiento en el luminoso, que a falta de 1:36 por jugarse, lucía el 52-64. Dos triples seguidos de Ricky Rubio hundían la remontada local y colocaban el -13 como colofón final de este tercer acto. Todo por decidir en los últimos 10 minutos, pese al mal partido en el tiro de los pupilos de Lakovic.
Angola, con una bandeja, y Pelos con canasta tras rebote ofensivo, lograban reducir la distancia psicológica de los diez puntos. Wong acercaba a los amarillos pero Birgander, dueño y señor de la pintura, colocaba el 64-75. Daniel Miret, con 5:43 por jugarse, solicitaba un tiempo muerto tras una bandeja sin oposición de Samar que colaba a 9 a los locales, no era momento de relajaciones después de mandar durante todo momento. Ricky Rubio, curtido en mil batallas, manejaba los hilos a su antojo ante la desesperación del Arena. La losa del primer cuarto parecía insalvable y la Penya jugaba a la perfección sus cartas. Tomic/Rubio gobernaban en pista al ritmo de pick and roll y el Granca, pese al esfuerzo, no podía seguir a los visitantes. Tiempo parado y ni la antideportiva de Tomic lograba meter en el partido a los amarillos. La Penya se movía a la perfección en las aguas revueltas y las faltas no permitían grandes parciales, tras tiro libre de Hunt, el luminoso lucía el 73-85. El partido acababa con un intercambio de golpes. Nado y murió en la orilla el Granca, que pese a maquillar el resultado, la masacre del primer cuarto fue demasiado para un conjunto que ve cómo sus opciones de Copa, pese a estar todavía en noviembre, pueden verse en serio peligro.
Los de Lakovic tendrán la oportunidad de resarcirse de su mal partido el próximo domingo, en el Arena, contra un rival de máxima exigencia, el Barcelona. Será un encuentro clave para las aspiraciones coperas y no situar el 3-5 en el casillero amarillo.
Llamar ahora
