• Las Palmas sigue sin encontrar la receta para ganar en El Plantío (0-0)

    Fútbol

    07-09-2025 14:12:55

    Iván Icígar

    La UD Las Palmas firma las tablas frente al Burgos en un nuevo empate a cero frente a los burgaleses. Los de Luis García jugaron un buen fútbol en lo ofensivo en el primer tiempo con numerosas ocasiones aunque sin la contundencia necesaria para lograr anotar. En la segunda mitad el ritmo bajó y con ello la Unión Deportiva dejó de generar ocasiones reales de gol y se acabó conformando con un empate, el segundo de la temporada.

    La cuarta jornada de la Liga Hypermotion para la UD Las Palmas comenzó con una tendencia evidente: los amarillos asumieron el dominio absoluto del balón, mientras el Burgos esperaba replegado en campo propio, preparado para golpear al contraataque. La primera ocasión de renombre llegó gracias a una acción individual de Marvin por la banda, donde tiró de velocidad para superar a varios defensores burgaleses y ceder a Manu Fuster. El valenciano, inspirado, intentó una genialidad con un pase de espuela que por centímetros no alcanzó a Luković, bien posicionado en boca de gol. El ex jugador del Albacete se erigía como un pilar en el ataque de la UD, pocos minutos después tuvo en sus botas el 0-1, tras un espectacular saque de banda de Mika Mármol que, prolongado inteligentemente por Cardona, llegó a Fuster. El mediapunta remató de primeras, pero su disparo se marchó alto..

    Apenas pasados los primeros diez minutos de partido, la UD Las Palmas disfrutó de su ocasión más clara: un mano a mano de Marc Cardona frente a Cantero en el que el guardameta del Burgos se agigantó para evitar el primer tanto visitante. Los amarillos continuaban ejerciendo un dominio casi absoluto sobre el césped de El Plantío y, a través de la conexión Marvin–Fuster, hacían sufrir a los de Luis Miguel Ramis. En una de estas combinaciones, el lateral amarillo firmó una brillante acción individual por banda ,con caño incluido, antes de ceder a Manu Fuster, que llegaba desde segunda línea. El valenciano conectó un disparo potente y bien dirigido, pero de nuevo emergió Cantero para frustrar el gol. Tras la oleada ofensiva de la Unión Deportivas, el Burgos dio un paso al frente. Los locales, más valientes y agresivos en la presión, forzaron un error de Mika Mármol en la salida de balón. David González recogió el regalo y probó fortuna, aunque se topó con un Dinko Horkas muy seguro bajo palos.

    Sin embargo, pese a la intención del Burgos de adelantar líneas, era la UD Las Palmas la que seguía transmitiendo mayor peligro, aunque la falta de contundencia en el área continuaba condenándoles. Primero fue Ale García quien, tras un buen amague dentro del área, probó suerte con un disparo que volvió a encontrarse con la muralla en que se había convertido Cantero. Poco después le llegaría el turno a un Miloš Luković quien tras irse de dos defensas burgaleses probaba suerte con un disparo raso que una vez más se topó con el guardameta pamplonica. Tras esas dos intervenciones consecutivas, los de Ramis comenzaron a soltarse en ataque mientras los amarillos reducían su dominio inicial. La ocasión más clara para los locales llegó con un remate de David González, que apareció desde segunda línea para conectar un centro aprovechando la tardía reacción de Iñaki. Sin embargo, su disparo no obtuvo una buena dirección y se acabó marchando alto. El susto se prolongó poco después con un pase de la muerte de Lizancos que descolocó a toda la zaga insular, aunque Chapela no logró llegar al balón por escasos centímetros. 

    El último cuarto de hora del primer tiempo destacaría por una notable reducción en las revoluciones de ambos equipos, con el partido entrando en una fase un tanto tediosa de juego. Superado ese tramo estéril, la UD Las Palmas consiguió reencontrarse con su versión más incisiva en ataque. Primero fue Miloš Luković quien, tras una serie de recortes en la frontal, se armó de disparo, aunque su remate se estrelló en la defensa local. Sin embargo, del córner derivado de esa acción nacería una de las oportunidades más claras con un potente remate de cabeza de Mika Mármol que se fue ligeramente por encima del larguero. En los instantes finales del primer acto, el estado del césped comenzó a condicionar el juego, restando fluidez a ambos conjuntos. Una secuencia desordenada del Burgos, con varios pases frenados por los botes del balón, desembocó en un disparo lejano de Morante que salió mordido y sin apenas peligro. La última ocasión del primer tiempo llevaría de nuevo el sello amarillo: Enrique Clemente, incisivo en el costado, sirvió un buen balón al área que la defensa burgalesa logró despejar, pero el rechace le cayó a Marc Cardona, quien no conectó bien su remate, desperdiciando la oportunidad de abrir el marcador. Con esa acción se cerró la primera mitad, con el 0-0 intacto en El Plantío.

    El inicio del segundo acto mantuvo la misma dinámica con la que había concluido la primera mitad: un ritmo más pausado y con escasas llegadas de peligro. La acción más destacada en ese tramo llevó la firma de Fer Niño, que con potencia y habilidad logró proteger el balón ante la defensa amarilla, encadenando dos reversos que le permitieron ganar espacio. En lugar de buscar el disparo, optó por asistir a Chapela, pero su envío fue interceptado por la zaga bien posicionada de Luis García. El Burgos, más cómodo e incisivo que en los primeros compases del encuentro, comenzaba a inclinar el campo a su favor. El 1-0 rozó el marcador en un potente disparo de Florian Miguel que obligó a Dinko Horkas a estirarse con reflejos felinos para desviar el balón. En esa jugada volvió a ser clave Fer Niño, fijando a los centrales y abriendo el espacio necesario para que su compañero pudiera ejecutar el remate.

    En el minuto 57, viendo a su equipo atascado en ataque, Luis García optó por mover ficha y dar entrada a Jonathan Viera en lugar de un Marc Cardona desdibujado en la banda. Las Palmas comenzó a mostrarse más ordenada en campo rival y a progresar con mayor claridad en cada posesión. Prueba de ello fue una jugada bien trenzada que culminó con un disparo de Loiodice desde la frontal, tras pase de Barcia, que obligó a Cantero a atrapar el balón con seguridad. Mientras tanto, el Burgos intentaba hacer daño al contragolpe explotando la velocidad por las bandas; en una de esas tentativas, Miguel trató de lanzarse en carrera, pero se topó con un Barcia expeditivo que abortó el peligro con una rápida anticipación. Sin embargo, el verdadero quebradero de cabeza para la UD en este tramo no llegaba desde el rival, sino desde su propio ariete: Miloš Luković. El croata, ya amonestado, no rebajó su ímpetu en las disputas y en una de ellas golpeó accidentalmente en el rostro a Sierra. El colegiado decidió perdonarle la segunda cartulina, aunque le dejó una advertencia clara: a la próxima acción similar, su noche terminaría antes de tiempo.

    A falta de veinte minutos para el final del partido, Luis García le daría la oportunidad a Iván Gil, ya recuyperado de su lesión de tobillo, de jugar mientras dejaba en el banco a un Manu Fuster que fue de más a menos durante la tarde. Con esta modificación al técnico ovetense le quedaba tan solo una ventana de cambios en la que podría sustituir hasta a tres futbolistas. El equipo local buscaba a Appin con un desplazamiento en largo pero Dinko Horkas estuvo atento para salir de su área y despejar de cabeza. Por la parte de la UD, Jonathan Viera dejaría su primera gran intervención del partido en un contraataque en el que filtró un gran pase en largo para Ale García que intentaba generar peligro con un centro que no encontró receptor. Poco después el 21 tuvo en sus botas un disparo pero a la hora de realizar el control, el balón botó lo que le dificultó un disparo limpio y no acabó yendo a buen puerto. 

    A falta de veinte minutos para el pitido final, Luis García decidió mover el banquillo y dar entrada a Iván Gil, ya recuperado de su lesión de tobillo, en sustitución de un Manu Fuster que había ido de más a menos con el paso de los minutos. Con esa variante, al técnico ovetense le quedaba ya únicamente una ventana de cambios en la que podía introducir hasta a tres futbolistas más. El Burgos trataba de sorprender buscando a Appin con un balón en largo, aunque Dinko Horkas leyó a la perfección la jugada y salió de su área para despejar de cabeza. En el otro costado, Las Palmas respondía con la calidad de Jonathan Viera, que dejó su primera gran intervención del encuentro al lanzar un contragolpe con un pase largo y preciso hacia Ale García. El canterano intentó prolongar la acción con un centro peligroso, aunque sin encontrar rematador. Minutos después, el propio Viera tendría en sus botas una ocasión para marcar, pero un mal bote en el control le impidió armar un disparo limpio, quedándose la acción en nada.

    En la recta final del encuentro, Las Palmas alargaba sus posesiones, aunque sin traducirlas en peligro real. La UD se mostraba espesa en la circulación de balón y con escasa claridad en los últimos metros, firmando un segundo tiempo estéril en lo ofensivo. En el minuto 83, Luis García agotó su última ventana de cambios con la entrada de Recoba y el esperado debut de Jesé, mientras Luković e Iñaki dejaban el césped. Con las algo renovadas, los amarillos intentaron encerrar al Burgos en su área. Ale García colgó un centro al segundo palo que Marvin parecía dispuesto a rematar, hasta que Mollejo apareció providencial para despejar de cabeza. Poco después, Jonathan Viera volvió a tirar de su clase con un envío envenenado a balón parado, aunque nadie llegó a conectar el remate. La última ocasión de la UD nació de un pase filtrado de Jesé para Recoba; el uruguayo se la devolvió de primeras al canterano, que asistió a Iván Gil, pero el disparo nunca llegó a producirse porque la defensa burgalesa se anticipó. Así se bajó el telón en El Plantío, con un nuevo empate sin goles de la UD, que volvió a quedarse a medias en tierras burgalesas.